Mientras decayeron las donaciones de sangre en casi un 80%, recordamos al Dr. Luis Agote médico e investigador fue el primero en realizar en el mundo transfusiones de sangre indirectas sin que la sangre se coagulara en el recipiente que la contenía. Luis Agote médico e investigador,
Primeros años
Hizo sus estudios secundarios en el Colegio Nacional Central (actual Colegio Nacional de Buenos Aires) de su ciudad natal. Ingresó a la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires en 1887, donde se graduó de médico en 1893 con una tesis sobre hepatitis supurada. En 1894 asumió como Secretario del Departamento Nacional de Higiene y en 1895 se hizo cargo de la dirección del lazareto de la isla Martín García. En 1899 fue designado Médico de Sala del Hospital Rawson (ciudad de Buenos Aires), donde más tarde fue Jefe de Sala.
En 1905 fue nombrado Profesor Suplente de la Facultad de Medicina y en 1915 Profesor Titular de Clínica Médica de la Universidad de Buenos Aires, cátedra esta última que tuvo a su cargo hasta su renuncia en 1929.
Las invetigaciones
Luis Agote, preocupado por el problema de las hemorragias en pacientes hemofílicos, encaró el problema de la conservación prolongada de la sangre con la colaboración del laboratorista Lucio Imaz. Sus primeros intentos, como el uso de recipientes especiales y el mantenimiento de la sangre a temperatura constante, no dieron resultado. Buscó entonces alguna sustancia que, agregada a la sangre, evitara la coagulación. Luego de muchas pruebas de laboratorio in vitro y con animales, Agote, aunque sin conocer el origen bioquímico del comportamiento, encontró que el citrato de sodio (sal derivada del ácido cítrico) evitaba la formación de coágulos.
Esta sustancia, además, era tolerada y eliminada por el organismo sin causar problemas ulteriores. La primera prueba con personas se hizo el 9 de noviembre de 1914, en un aula del Instituto Modelo de Clínica Médica, teniendo como testigos al Rector de la Universidad de Buenos Aires, Epifanio Uballes, el decano de la Facultad de Medicina, Luis Güemes, el Director General de la Asistencia Pública, Baldomero Sommer, y el intendente municipal, Enrique Palacio, además de numerosos académicos, profesores y médicos.
Durante la misma un enfermo que había sufrido grandes pérdidas de sangre recibió la transfusión de 300 cm3 de sangre previamente donados por un empleado de la institución y conservados por la adición de citrato de sodio. Tres días después el enfermo, totalmente restablecido, fue dado de alta.
Luis Agote, lejos de los centros científicos más importantes y avanzados, logró resolver el problema de las transfusiones que angustiaba a los miles de médicos reclutados por los ejércitos europeos durante la Primera Guerra Mundial. Fue un gran aporte a la medicina mundial, que contaría desde entonces con un método de transfusión de sangre simple, inocuo y fácil de ejecutar por un profesional idóneo. El periódico estadounidense New York Herald publicó una síntesis del método de Agote y percibió sus proyecciones futuras, afirmando que tendría muchas otras aplicaciones además del tratamiento de hemorragias agudas.
Actividad política
La vocación de servicio de Agote no se agotó en la medicina. Actuó desde joven en la vida política argentina. Fue elegido Diputado y Senador en la provincia de Buenos Aires; designado Comisionado Municipal del Partido de General San Martín en 1912 y dos veces Diputado Nacional (1910 y 1916). Desde esta última banca fue autor de leyes como la creación de la Universidad Nacional del Litoral, la anexión del Colegio Nacional de Buenos Aires a la Universidad de Buenos Aires y la creación del Patronato Nacional de Menores Abandonados y Delincuentes.
Publicaciones
Escribió sobre temas médicos y sanitarios, literarios e históricos, siendo algunas de sus obras Nuevo método sencillo para realizar transfusiones de sangre (1914); Estudio de la higiene pública en la República Argentina, memoria del Departamento Nacional de Higiene; La úlcera gástrica y duodenal en la República Argentina (1916); La litiasis biliar (1916); Ilusión y realidad (poema); Augusto y Cleopatra; Nerón, los suyos y su época. Una psicopatología del emperador romano (1912); Mis recuerdos. Gran parte de su obra médica fue publicada en los Anales del Instituto Modelo de Clínica Médica.
Distinciones
A lo largo de su vida recibió múltiples distinciones, entre otras: Profesor Honorario del Colegio Nacional y de la Universidad de Buenos Aires; Miembro Honorario de la Academia Nacional de Medicina; Presidente Honorario de la Academia Nacional de Bellas Artes, de la Asociación Tutelar de Menores y del 8º Congreso Nacional de Medicina. La República de Chile lo distinguió, en 1916, con la Orden al Mérito.
Fallecimiento
Agote falleció en la ciudad de Turdera el 12 de noviembre de 1954, exactamente tres días después de haberse cumplido los 40 años de la primera transfusión de sangre que lo tuviera como principal protagonista. Para honrar su contribución a la Medicina se bautizó con su nombre a una calle, una Escuela Nacional de Comercio, el Instituto Modelo de Clínica Médica, el Instituto Nacional de Protección de Menores, el Centro de Hemoterapia del Hospital de Clínicas —todos de la ciudad de Buenos Aires— así como a escuelas primarias, centros de hemoterapia y bancos de sangre de todo el país. Sus restos descansan en el cementerio de la Recoleta.